Mary Shelley, más que una mujer detrás de Frankestein
Mary Shelley nació y murió en Londres en el siglo XIX, un siglo marcadamente convulsionado por revoluciones. Por aquel entonces, Londres se erguía como la capital de las finanzas, el arte, las ciencias y las riquezas. La cuna de la Revolución Industrial que traía consigo un aumento descontrolado de la desigualdad y la pobreza que se reflejaban en las obras literarias de la época.
Historia familiar marcada por la escritura y el activismo político.
Mary nació como Mary Godwin un 30 de agosto de 1797. Hija de la talentosa escritora feminista, Mary Wollstonecraft Godwin y del filósofo anarquista William Godwin. Su madre Mary, además de ser una destacada escritora, también era una reconocida filósofa que logró establecerse como una profesional independiente en una época en la cual, las mujeres, vivían entre sombras o recluidas.
Un aporte enorme a la lucha por las reivindicaciones de las mujeres quedó plasmado en su estelar obra «Vindicación de los derechos de la mujer» en donde la filósofa y ensayista inglesa, realizaba fuertes críticas no solo a la sociedad sino al sistema educativo que formaba a las mujeres en valores que la autora consideraba como «nociones equivocadas de la excelencia de la mujer». Wollstonecraft murió a los once días de dar a luz a su segunda hija, Mary.
«Uno de esos seres que sólo aparecen una vez por generación, para arrojar sobre la humanidad un rayo de luz sobrenatural. Ella brilla, aunque parezca oscurecerse y los hombres crean que está apagada, pero se reanima de repente para brillar eternamente»- Mary Shelley acerca de su madre.
Con respecto a William Godwin, su padre, podemos caracterizarlo como un hombre cuyas ideas radicales sentaron las bases para el surgimiento de lo que sería el pensamiento anarquista en el Reino Unido. Sin embargo, lo más importante que cabe destacar dentro de su vida, fueron sus vínculos con las dos literatas más importantes del siglo XIX.
Mary Shelley, entre la pasión literaria y el activismo liberal.
Dos pasiones heredó Mary de sus progenitores, la pasión por la literatura y el activismo liberal. Su obra cumbre, Frankestein fue concebida y escrita como respuesta al reto de Lord Byron durante una estadía tormentosa en Ginebra cuando instó a todos sus invitados a escribir historias.
Mary Shelley se casó con el poeta Percy Shelley quien por entonces era un gran admirador de su padre, Godwin. Al constituir su pareja con Shelley, ambos huyeron a Francia donde vivieron durante un tiempo. Su matrimonio la enfrentó a una serie de infidelidades y de endeudamientos que ella misma tuvo que sortear mediante sus publicaciones para poder mantener a su familia. Años más tarde, Percy Shelley morirá ahogado cuando se velero se desvanece durante una tormenta en alta mar.
La vida de Mary Shelley no fue fácil. La escritora tuvo que sobreponerse a la muerte de tres de sus cuatro hijos e indudablemente, todos estos episodios trágicos a lo largo de su vida se vieron reflejados en sus obras literarias y, en cierto modo, dieron rienda suelta a su creatividad.
En Frankestein, supo plasmar las inquietudes que tanto Lord Byron como su pareja, Percy Shelley, expresaron en torno a lo referido a la creación y la naturaleza del ser humano. Con solo 18 años, la prolífica escritora tomó todo esto que, junto a sus experiencias personales de muerte, rechazo y condena por su modo de vivir al lado de Shelley, engendraron a una criatura configurada por partes de diferentes cadáveres que, ante el desprecio de su creador, recurre al homicidio como herramienta de venganza.
«Los monstruos, los creamos nosotros» – Mary Shelley.
Ni una sola regalía cobro, Mary Shelley por Frankestein ni siquiera por las diversas adaptaciones teatrales que surgieron a partir de su obra. Fue desheredada por el padre de Shelley debido a que reeditó la obra de su pareja a pesar de la prohibición que pesaba sobre ésta. En 1831, reedita Frankestein y en ésta, su crítica hacia la sociedad del momento fue mucho más osada que en la versión que la precedió. Como fuente de ingreso, comienza a escribir ensayos biográficos para The Cabinet Cyclopedia, en donde fue la única colaboradora mujer y logra documentar al menos, cincuenta retratos y biografías de mujeres.
Mary Shelley fue una escritora con una poderosa narrativa. Vivió su vida bajo sus propias reglas. Fue madre y tras la muerte de sus hijos «dejó de ser madre» tal como ella aseguraba. Fue ensayista y biógrafa. Su obra abrió la puerta a la ciencia ficción y el gótico que rompió con las estructuras de la época.